En
épocas en donde el Estado esta designando el dinero que ubicara en cada ámbito del
país, los educadores uruguayos, buscan llevarse su tajada, y la única manera
que parece ser que han encontrado es haciendo paros.
Dentro
de sus pedido se encuentra la consigna de que los profesores y maestros ganen
30.000 pesos como sueldo mínimo para un maestro recién recibido, y otra serie
de pedidos como el de más adscriptos para los liceos y más personal, que lleven
a cabo las diferentes tareas dentro de
los locales estudiantiles.
Buscan
lograr todo esto haciendo un paro por tiempo indeterminado, es decir que hasta
que ellos lo consideren los alumnos no tendrán clases.
Lo
que parece ser que les importa muy poco es la cantidad de horas que estudian
los jóvenes uruguayos ya que mientras ellos paralizan sus actividades sus
alumnos pierden horas de clase, es decir para lograr lo que quieren, toman de
rehenes a sus alumnos negándoles la posibilidad de estudiar y asistir a los
centros educativos.
Quizás
sus reclamos sean entendibles y hasta necesarios, pero es siempre la misma
historia, realmente molesta que a ellos les importa su bolsillo y nada más, los
estudiantes quedan librados al azar, ya que con la perdida de horas de estudio,
luego dan los programas por arriba, como para cumplir, o ni siquiera logran
terminarlos.
Gabriel Cortazzo
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