En tiempos de exceso
de información a veces es necesario entender que esto nos juega en contra para
poder concebir realidades que nos pueden marcar nuestro futuro.
La
facilidad con la que hoy en día todo el mundo opina y crea noticias de acuerdo
con sus convicciones o conveniencia, a comenzado a jugarle en contra a una opción
tan democrática como es que todos tengamos el acceso que queramos a la información.
La mayor apertura diferentes tecnologías por parte de los distintos escalafones
de la sociedad ha logrado que cualquier persona se acerque a lo que quiere en
segundos, pero muchas veces hay que chequear la veracidad de esta información.
Hoy
en día existe una gran necesidad de determinados actores de la sociedad por
acercarse al poder y esto no tienen que estar estrictamente vinculado con gobernar
un país, sino también con los diferentes clubes de fútbol o simplemente llevar
las riendas de una organización en donde la elección de su dirección sea
mediante el voto popular, el rol de los medios y las redes empezó a ser
fundamental, ya sea para jugar a favor en contra.
Manejar
bien o mal una información, puede a veces determinar una decisión de cualquier
tipo, no estamos acostumbrados como sociedad a chequear de donde salen las
noticias que leemos, simplemente las damos como ciertas y las asumimos con gran
relevancia. Muchas veces el beneficio de la duda puede llegara a cambiar el rumbo
de una situación, quizás esto sea algo que lo deberíamos de tener más en
cuenta.
El
jugar con la ignorancia de la gente a nivel de conocimiento es un acto que el
ser humano viene cometiendo desde tiempos inmemorables, hoy por hoy existe la
clara contrariedad de que todos podemos acceder a todo, pero como necesitamos
velocidad y dinamismo, pasamos por alto detalles fundamentales como que tenemos
el poder en nuestras propias manos de saber si lo que nos quieren hacer creer
es real o simplemente una jugada para buscar sacar un beneficio a costa de
nuestra desinformación.