ENTREVISTA A JOSEFINA TRIAS

Forma parte de la nueva generación del teatro uruguayo, desde hace años viene desarrollando talleres de teatro para todas las edades en la localidad de Las Piedras, forma parte de la banda “Otro Tavella y los embajadores del buen gusto” con quien próximamente se estarán presentando en vivo, pero antes, Josefina Trías paso por Periodismo en tus Manos.

¿Cómo comienza tu amor por el teatro?

Desde muy chica. Podría decirte que no tengo un recuerdo exacto de cuándo fue ese momento. Siempre lo supe. Nunca tuve que decidir nada con respecto a lo que “ser”. Estaba todo el día frente al espejo jugando y fui una niña muy feliz. Supongo que algo de eso hay, de querer mantener esa capacidad e ingenuidad intactas durante toda la vida. Mi madre me llevaba al teatro de chica, me leyó durante muchos años, todas las noches, novelas y cuentos para niños. Siempre se escuchó mucha música en casa de todo tipo. Todo eso supongo que va dándole un lugar a lo espiritual muy importante. 

¿Cómo surgieron las actividades de los talleres de teatro?

Cuando estaba cursando el último año de la IAM (Instituto de Actuación de Montevideo) surgió, de manera muy natural (casi tan natural como decidir ser actriz) la posibilidad de dar clases de teatro en Las Piedras. El club Juventud de Las Piedras me dio esa posibilidad con 21 años y arranqué a dictar un taller para adolescentes. Los años siguientes sumé grupos de adultos y niños. 

De acuerdo a la experiencia que has tenido ¿Cuál es la recepción de la gente a ese tipo de actividades?

Muy buena. Ha sido un proceso lento y de mucho trabajo, pero hoy en día, ya hace ocho años que doy clase en Las Piedras y es un lugar y aspecto de mi vida que cuido mucho, además de que es mi trabajo. Sigo manteniendo los tres grupos y he podido ir construyendo un método con el cual me siento muy cómoda. Y los alumnos son felices. Eso es lo más importante.

¿Qué opinión tenes de las obras para niños? Que muchas veces son criticadas por su escaso contenido ¿crees que se subestima a veces al público?

Este fue el primer año desde el 2009 que no hice temporada en julio y extrañé profundamente.

Es un género que me fascina. Tengo alumnos niños y escribo obras para ellos y el punto está en escucharlos, en entender qué quieren contar, cuáles son sus deseos, sus intereses. Con respecto a la segunda pregunta, creo que el error es considerarlo un género mejor, o creer que porque son niños hay que dejarles todo más digerido y ellos están hasta más entrenados que nosotros en su mirada, están más acostumbrados en términos de complejidad, velocidad, por su natural vínculo con la tecnología, etc. Y desde ese lugar, hay que conquistarlos. Sino la competencia es muy desleal. Con todo esto, no estoy desmereciendo lo artesanal del teatro, ni el poder de una buena historia. Pero son aspectos que debemos considerar cada vez más.  

¿Qué tiene que tener el libro de obra para que te seduzca a formar parte del elenco?

Son muchas cosas. En primer lugar el texto. El director y el elenco siempre definen. Y en algunos casos, el tipo de proceso creativo es definitorio porque uno sabe que va a poder entrenar determinados aspectos de la actuación. A veces al comienzo no hay textos o hay un texto base que se irá modificando en los ensayos, entonces uno hace un equilibrio entre todos los aspectos.

¿Pensás en algún momento dedicarte a dirigir o escribir?

Con los grupos que dirijo en Las Piedras en el Centro Pareja, todos los años, montamos un espectáculo cuyo texto es escrito por mí, luego de un proceso de dramaturgia de escena.

El año que viene estreno en Montevideo un monólogo donde actúo y escribo. La dirección es de Bruno Contenti, un director y dramaturgo muy joven y talentoso.

¿Qué opinión tenes del genero  stand up?

Para tener una opinión tendría que ser consumidora del género y no lo soy. Sí te puedo decir que soy amante de la comedia como género en todas sus vertientes y subgéneros y el humor es algo que me obsesiona. 

¿Se puede vivir en Uruguay de la actuación?

No, por eso la mayoría de los actores uruguayos hacemos otras cosas. Yo doy clases de teatro en distintos lugares.

Además de la carrera de actuación, estudié en la facultad de humanidades: Tecnicatura en Corrección de Estilo y Licenciatura en Letras. De la primera me recibí y ejerzo como correctora de estilo desde el 2015. La licenciatura aun no la terminé.

¿Cuál son tus proyectos en la actualidad a nivel personal y profesional?

Este fin de semana que pasó bajamos en la Zavala Muniz “Inconfesable, sonata para dos actrices”, espectáculo de Lucía Trentini donde el tuve el placer de trabajar como actriz. Seguimos con funciones de Magnolias de Acero en Teatro Alianza desde abril. En Noviembre se repone “Subterrránea” de Bruno Contenti. Y en marzo, la idea es estrena mi primer monólogo.

Sigo cantando en la banda “Otro Tavella y los embajadores del buen gusto”. Ahora el 15 de octubre tenemos un toque/presentación del disco.

Sigo dando clase, ahora ya en el armado de las muestras de fin de año.