Es
poeta, docente, productor y periodista, entre otras tantas cosas, ha marcado
historia en los medios de comunicación uruguayos, llevando adelante éxitos en
épocas donde había que tener talento y no likes o visitas; en esta oportunidad
paso por Periodismo en tus Manos Ignacio “nacho” Suarez.
¿Cómo
te diste cuenta de que tenías cierta capacidad creativa?
Cuando
en la Escuela Ramírez de Rocha, se nos pidió escribir una redacción sobre un
enorme pino que teníamos en el patio, y que había sido quemado por un rayo en
una gran tormenta. Y a mí me salió en verso. Lo que no fue pasado por alto por
el director que era poeta, Rosalío Pereira, quien reunió en el Salón de Actos,
a todas las clases para que lo leyera, lo que, obviamente, embargado por la
emoción, no pude hacerlo. Desde entonces, me motivó mucho para seguir
escribiendo. Y la lectura de los grandes poetas…
¿Cómo
logras relacionarte con el entorno artístico montevideano?
Fundamentalmente
trabajando en la Secretaría de Relaciones Públicas de la Feria Nacional del
Libro y Grabados, de la poeta y Gestora Cultural Nancy Bacelo, que todos los
fines de año se realizaba en el Atrio aún sin terminar del Palacio Municipal.
Luego, desde mis propios programas televisivos o radiales.
¿Qué
rol ocupa en tu carrera artística Yamandu Palacios?
Yamandú
integraba un grupo de amigos en los que estaban cantores, actores, poetas,
artistas plásticos como Jonio Montiel, Manolo Lima, Salvador Puig, Alfredo
Zitarrosa, Juan Capagorry, Juan Gentile, Iván Kmaid, los hermanos Puchet, Julio
Guillot, Alberto Zapicán, etc. Que, por
lo general, nos reuníamos en el Taller del pintor Ángel “El Chino” Foong en la
calle Minas. De allí surgió la idea de musicalizar poemas míos y nació el
“Larga duración” o “ Long Play” – como decíamos entonces- “Poeta al sur” con
gran empuje de Alfredo Zitarrosa y de Enrique Estrázulas, poeta, novelista y
diplomático que, por entonces, oficiaba de Representante de Alfredo. Fue un
hecho muy importante por aquellos tiempos y aún hay gente que lo recuerda…Hay,
por la tanto, un antes y un después de la musicalización y el canto de mis
textos por parte de Yamandú en ese histórico disco.
¿Cómo
podrías definir tu relación con Alfredo Zitarrosa?
…
A toda esa barra nos unía, además, el amor por la poesía del peruano César
Vallejo. Una muy fría noche conocí a Alfredo en un Vinería que Yamandú y
Oscarito del Monte tenían en la parte de atrás de un viejo boliche en Tristán
Narvaja y Cerro Largo, llamado “La Chimba”, como un conocido personaje radial
de aquellos años. La vinería, de la época de “Las Telitas”, “Teluria”,
“Altamar”, “La Sombrilla”,” ¡Los Cocuyos” se llamaba “La Cucaracha” …Imagínate
cómo era! Alfredo cantaba canciones españolas… Desde esa noche Vallejo nos unió
para siempre. La definición sería la de un hermano…
¿Qué
comparativa podrías hacer de los medios de comunicación en aquella época con
los de ahora?
No
me canso de decir que provengo de una generación de profesionales hechos en el
hacer, en la práctica, en el mismo trabajo…No teníamos Academias, pero nos daba
mucha vergüenza no saber. Por eso, éramos quizá más rigurosos en la salida al
aire o en las publicaciones y no nos perdonábamos los errores ajenos y, menos,
los propios…
Quizá
había más rigor profesional. Era más difícil integrar los cuadros
profesionales, quizá porque la competencia era otra, o porque también había
otro nivel de dirección, de coordinación y hasta en la corrección. Me parece
increíble los errores, hasta gramaticales o de ortografía, que ahora dejan
pasar. ya en los Diarios como en la Televisión, para hablar solamente de la
forma y no de los contenidos que, en algunos casos, dan pena!
¿Crees
que procesos sociales como las dictaduras fomentan más la creatividad que la
democracia?
No
creo que la fomenten, todo lo contrario. Pero, en épocas de censura, los
creadores o los comunicadores buscan formas más sutiles y, en algunos casos más
originales para la trasmisión de las ideas o de los hechos. Se le saca más
punta al lápiz para escribir entrelíneas y el oído del oyente o el ojo del
lector también se prepara para escuchar lo que no se dice directamente. Por eso
se dieron, por ejemplo, en nuestro país, procesos como el del Movimiento del
Canto Popular, de la Poesía o del Teatro…
¿Cómo
podrías definir el momento social actual?
Estamos
en una época de transición, de cambio, de transformaciones. De un avance
impresionante de la tecnología comunicacional. De cambios de paradigmas y de
grandes dudas. Como, por ejemplo, las que generan la llamada Inteligencia
Artificial. Antes, en el Siglo pasado, era el hombre el que traía a la casa las
noticas del mundo. Hoy son los nietos, que son quienes manejan la tecnología. Y
ese cambio es sólo un ejemplo de las transformaciones culturales y sociales. El
desarrollo de los Medios ha convertido a la gente en Mercado, en meros
consumidores. Hoy transitamos por una cuerda floja entre Ser y Tener. Y la
primera víctima es la paz interior, la felicidad humana…El consumo y los
suicidios crecen día a día…
¿A
que le escribís o que te motiva a la composición?
La
vida misma. Sus asombros, sus misterios. La búsqueda de la felicidad, La
belleza, el amor, la soledad…
¿Todo
tiempo pasado fue mejor?
No
creo que todo tiempo pasado fue mejor. No hay mejor tiempo que el presente, que
es lo único que tenemos. “Nuestra única moneda valedera” al decir del poeta
Líber Falco. El ayer ya fue, el futuro vendrá, o no…Somos aquí y ahora.
¿Qué
te resta por hace que ya no hayas hecho?
Me
restaba esta nota… Por ello, muchas gracias…