Hemos
vivido un comienzo de año realmente atípico a nivel del clima en nuestro país,
tuvimos un febrero a pleno sol y calor que por lo general llega con mucha
lluvia y lo sufren tanto los conjuntos de carnaval, como los que deciden irse
de vacaciones en esa fecha.
El
otoño ha llegado con temperaturas elevadas para la época y con muy pocas
lluvias también, si bien en las próximas horas se espera que desmejore el
clima, no alcanzaría con la lluvia pronosticada como para poder apalear la situación.
Obviamente esta realidad trae aparejada, el riesgo de incendios en campos y
montes, la falta de agua para los animales, ya que tanto tajamares como arroyos
han bajado notoriamente su profundidad, las represas que producen energía también
cuentan con menos agua para poder producir electricidad y sobre todo las
plantaciones están sufriendo la falta de algo tan vital como el agua.
Lamentablemente
de seguir así esto terminara repercutiendo en unos meses en el bolsillo de
todos los uruguayos, ya que probablemente las cosechas no sean las esperadas
por los productores y empiece a escasear la fruta y la verdura en nuestro
mercado por lo que indudablemente aumentaría de precio.
El
Ministerio de Agricultura Ganadería y Pesca, está muy atento ante tal realidad y
a la espera de que si esta situación no mejora en las próximas horas declarara
un alerta ante el déficit hídrico y se empezaran a tomar medidas para apalear
tal situación.
Gabriel Cortazzo
