Estudiar, investigar, formarse, intentar saber más y profundizar sobre determinados asuntos que pueden generar interés de tipo personal o académico. Estas prácticas, parecen quedar cada vez más en el pasado. La actualidad marca que cualquier persona por más modesta que sea, lleva consigo un teléfono celular y muy probablemente tenga acceso a internet a través de datos móviles o de una red de wifi. A partir de este punto las diferencias entre un grado cinco de medicina y aquel que apenas termino la escuela pero que sabe manejar su dispositivo móvil con destreza se empiezan a acortar.
Todo lo que necesitemos saber o casi todo, se encuentra en un buscador web, en la actualidad la ayuda de la inteligencia artificial en los motores de búsqueda a comenzado a hacer más certeros los resultados a la hora de desplegar diferentes opciones sobre una consulta realizada. Por lo que aquello de memorizar fechas históricas o datos importantes, comienza a quedar obsoleto ya que esos datos se pueden encontrar en cuestión de segundos, ni que hablar de la obsolescencia de acceder a un diccionario para poder encontrar una palabra (practica muy utilizada en el siglo pasado).
Esta realidad sin dudas despierta una serie de cuestionamientos de tipos filosóficos con respecto a la humanidad y al sentido real que tiene todo lo que hacemos, es decir si el conocimiento está al alcance de un smartphone, para que pasar años formándonos intelectualmente, si en segundos podemos llegar a lo que buscamos discriminando en el camino todo aquello que entendemos que no nos es útil.
¿Cuál es la reconfiguración que surge en la búsqueda por el conocimiento a partir de este punto? ¿Cuál pasaría a ser la definición de ignorancia? ¿Somos todos un poco más sabios o cada vez más ignorantes?
Existe un nivel muy grande de confianza a aquello que nos brinda internet como respuestas a nuestras necesidades o consultas que rara vez es puesto en tela de juicio. La ayuda del conocimiento on demand ha generado que cada vez tengamos que razonar menos y cuestionarnos al mínimo las realidades impuestas por un sistema que funciona de gran manera haciéndonos llegar hasta nosotros lo que necesitamos.
Estamos en un tiempo de interrogantes acerca del futuro de las diferentes sociedades y su comportamiento ante una realidad que cada día esta más presente y normalizada por quienes han decidido aceptar e integrar las nuevas tecnologías a la vida cotidiana, como toda arma poderosa creada por el hombre, dependerá de el mismo el nivel de conciencia que tenga para utilizar a favor o en contra de la propia humanidad.